¿Es este el cambio tranquilo?
En Steilas mostramos cierta inquietud ante el adjetivo calificativo elegido
por la presidenta para denominar al anhelado cambio: tranquilo.
Suponemos que se quería huir de términos como radical, que pudiesen
producir alarma en ciertos sectores sociales, pero temíamos que el
cambio «tranquilo» supusiese no cambiar nada.
Y parece que nuestros temores no eran infundados.
El nombramiento de Juan Ramón Elorz como Director General de
Educación lo confirma.
Mendoza pretende mantener la bicefalia iniciada por el anterior consejero
y que tan malos resultados tuvo y además, nombrar como máximo
responsable de recursos humanos a quien ha ostentado la dirección del
Servicio de Inspección, uno de los brazos ejecutores de los recortes
perpetrados durante los últimos años.
Manifestamos nuestra total discrepancia con esta decisión, que
esperamos se rectifique de inmediato. Entre el personal funcionario de
educación, existen personas perfectamente cualificadas para realizar esa
función, sin tener que recurrir a quienes han colaborado activamente con
las lamentables decisiones, adoptadas por los anteriores ejecutivos.
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