Los sindicatos firmantes expresamos nuestro rechazo al proyecto de ley con el que se autoriza la puesta en marcha en Vitoria-Gasteiz de la universidad privada con ánimo de lucro EUNEIZ (European University Gasteiz). Ley que ya obtuvo el visto bueno del Gobierno Vasco el pasado 16 de marzo y ahora necesita la aprobación del Parlamento Vasco para entrar en vigor.
Quienes trabajamos en la UPV/EHU vemos con gran preocupación que, mientras las aportaciones económicas a la universidad pública son insuficientes, a las «universidades» privadas se les da cada vez más facilidades y se les destina cada vez más dinero público. Todo ello incide en las tasas que deben pagar los alumnos, en la insuficiencia de plantilla, en los escasos sueldos que sufren algunos profesores e investigadores, en la escasez de recursos para la investigación y en un largo etcétera.
Son numerosas las razones por las que quienes gestionan el dinero de todos y todas no deben apoyar la EUNEIZ:
-Desde 1997 el número de estudiantes universitarios no ha variado, mientras que el número de universidades privadas no ha parado de aumentar. En lugar de apostar por el modelo público de educación superior, se está priorizando el modelo de negocio educativo que representan proyectos como EUNEIZ. Las universidades privadas, incluida EUNEIZ, fomentan el elitismo y la segregación en función del origen socio-económico de la ciudadanía.
-EUNEIZ duplicará las titulaciones existentes en el Sistema Universitario Vasco (Grado en Fisioterapia, Grado y Máster en Ciencias de la Actividad Física y del Deporte, Grado en Producción y Emprendimiento de Contenidos Digitales) a pesar de que en la citada Ley se recoge la necesidad de desarrollar la oferta de forma armonizada. En este sentido, EUNEIZ entra en competencia con la UPV/EHU, tanto para conseguir alumnos como recursos procedentes de las Administraciones.
-El proyecto EUNEIZ se sostiene en dos Centros adscritos a varias Universidades catalanas (EUSES y ENTI), dos escuelas que no llegan a ser Universidades. A pesar de llamarse escuelas universitarias, no cumplen con las características exigidas para ser universidades.
-La documentación presentada no informa de las condiciones de trabajo del personal que va a contratar EUNEIZ, ni de las funciones de trabajo ni de sus requerimientos. Como es habitual en las universidades privadas, se prevé una jornada a tiempo parcial y una temporalidad muy alta.
-Tampoco aclara la incidencia o presencia del euskera dentro de sus planes educativos. Cuando en la UPV/EHU, hoy por hoy, no está garantizada la impartición en euskera de la totalidad de los grados y, menos aún, de los másteres en euskera, en una universidad privada elitista, con ánimo de lucro orientada hacia fuera del País Vasco como EUNEIZ, la presencia del euskera será aún menor.
Por todo ello, queremos manifestar claramente que la aprobación de este proyecto sólo responde a intereses económicos y políticos. Queremos denunciar que se deja de lado el bien común y la igualdad de oportunidades para beneficiar a unas pocas personas adineradas. No se puede dar carta blanca a empresas dopadas con dinero de fondos de inversión que convierten meras academias en universidades. Universidades que se convierten en máquinas de expender titulaciones a precio de oro.
Con proyectos como el de EUNEIZ algunos políticos (socios de gobierno del Ayuntamiento de Vitoria-Gasteiz, la Diputación de Álava y el Gobierno Vasco), están permitiendo el desmantelamiento del sistema universitario público, dando la espalda a la ciudadanía. Ejemplo de ello es, entre otros, que el Gobierno Vasco haya situado el proyecto EUNEIZ entre los programas europeos de acceso a fondos públicos Next Generation EU pidiendo 64 millones de euros, mientras que para la UPV/EHU ha solicitado mucha menos cantidad.
La sociedad vasca, necesita una Universidad Pública de calidad, capaz de desarrollarse permanentemente y adaptarse a las nuevas necesidades, que debe ser regulada y canalizada desde nuestro propio marco legal. Una Universidad pública vasca en la que toda su plantilla trabaje en condiciones laborales dignas y que nunca olvide su sentido original, que es dotar de saber y conocimiento a la ciudadanía, sea cual sea su origen y nivel socio-económico.
No necesitamos universidades privadas de este tipo; el dinero público debe ser para fortalecer los servicios públicos. Por todo ello decimos alto y claro No a EUNEIZ.
En defensa de la educación universitaria pública, ¡paralizar EUNEIZ!!
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