Israel ha concedido la libertad condicional a Juani Rishmawi, trabajadora humanitaria palestina y colaboradora de Hala Bedi. El pasado diciembre, una comisión israelí se negó a conceder la libertad condicional a Juana.

El 17 de noviembre, un tribunal militar israelí le condenó a 13 meses de prisión y a una multa de 14.000 euros. Una semana antes, se aprobó un acuerdo con la fiscalía para rebajar la pena.

Rishmawi, responsable de proyectos de la organización sanitaria palestina Health Work Committees, fue detenida la madrugada del 13 de abril del año pasado. Desde entonces ha sufrido aislamiento, continuos interrogatorios y continuos cambios de prisión. Hasta en cuatro ocasiones se ha retrasado su comparecencia ante la justicia militar del régimen de ocupación israelí.

Las denuncias contra Rishmawi, entre ellas la de pertenencia a una organización ilegal y el desvío de fondos de la cooperación al Frente Popular para la Liberación de Palestina, tienen muy poca credibilidad teniendo en cuenta los estrictos controles que sufren las subvenciones públicas a la cooperación, lo que no es óbice para que el régimen de Tel Aviv continúe con esta sanción ejemplarizante contra esta cooperante.