Cada día reproducimos la cultura de los ricos. Por ejemplo, midiendo el éxito social en base a los viajes realizados en avión o cayendo en el ciclo del capital de producir-consumir-producir cada vez más acelerado, hasta convertir los accidentes de tráfico y el suicidio en un problema estructural, las dos principales causas de muertes de los y las jóvenes. “Gerora begiratuz ilun baitago dena” dicen las voces jóvenes; mirando al futuro, todo está oscuro dicen.
Hemos abierto este siglo con tres grandes terremotos, expresiones de la crisis socioecológica producida por el choque de nuestras sociedades contra los límites biofísicos del planeta: la crisis de 2008, la pandemia y la guerra de Ucrania. Pero también ha sido el tiempo de un nuevo despertar ecologista. En este contexto en el que el suelo ha dejado de estar quieto y la gente ha empezado a decir basta, organizamos las Ekotopaketak y ahora pretendemos trasladar a la calle la fuerza entonces acumulada.
Con este objetivo os presentamos hoy la dinámica Jauzi Ekosoziala, un movimiento, que aún no se ha convertido en hogar, un movimiento plural y eficaz, propositivo, que comienza a articularse en los cuatro territorios de Hego EH, en contra de la hegemonía neoliberal y a favor de la vida, abriendo el camino a las transformaciones estructurales. De hecho, los cascos viejos llenos de turistas y los mares devastados de peces tienen detrás la misma causa: un mercado que busca maximizar constantemente sus beneficios.
La dinámica Jauzi Ekosoziala constará de dos fases: primero una campaña hasta el verano; y segundo, después de verano, un proceso de debate que queremos abrir dentro del ecologismo para debatir con diferentes personas y agentes sobre la forma concreta que debe tener esta herramienta.
Junto a Jauzi Ekosoziala, os presentamos también la campaña con la que iniciamos el camino: Haien luxua gure fakturak, Su lujo nuestras facturas, donde abordaremos la crisis energética y climática como un todo.
A lo largo de estos meses vamos a llevar a cabo diversas iniciativas, la primera de ellas el 17 de Febrero, día internacional contra la pobreza energética.
Desde Jauzi entendemos que en este mundo finito la pobreza y el derroche son dos caras de la misma moneda y que si bien toca atajar el problema de la pobreza energética, también deberíamos estar hablando de derroche energético. El jet privado de los ricos fósiles es la otra cara de la moneda de las facturas que no podemos pagar.
Necesitamos una transición ecológica y social justa, y empezamos el camino con estas cuatro reivindicaciones:
- ACABAR CON LA POBREZA ENERGÉTICA. Ignacio Galán, presidente de Iberdrola, ha tenido 13 millones de euros de beneficio, pero en nuestro territorio hay más de cien mil personas en pobreza energética. Como dice Willis Drummond, “inor ez da aberasten zerbait esplotatu gabe”, nadie se enriquece sin explotar algo.
- PUBLIFICAR LA ENERGÍA. Como la educación y la sanidad, pues las necesidades básicas no son un negocio sino derechos.
- STOP FÓSILES. Es sencillo, dejamos los fósiles o nos convertimos en fósiles. Debemos proteger el clima y la naturaleza que nos queda, empezando por el cierre de las centrales de ciclo combinado de EH.
- LIMITAR EL LUJO. Para que todos tengamos suficiente debemos empezar limitando el derroche desde arriba. En el Estado Español los más ricos emiten 5 veces más C02 que la gente normal. Está claro: los ricos son insostenibles.
El futuro no es oscuro, sino gris o verde. Es hora de luchar. Te invitamos a participar en la construcción de esta nueva ola verde, porque organizarse colectivamente es la mejor acción que cada uno pueda hacer.
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