El proyecto para 2015 nace constreñido por los compromisos económicos adquiridos por el GV con las políticas de Madrid y UE: el pago de la deuda (174 m. más que en 2014) y la reducción del déficit público (del 1 al 0,7%). Como consecuencia de ello, el gasto total de los diez programas del Departamento que se destinan a educación va a crecer únicamente un 0,8% respecto a 2014. Esa subida además, se queda anulada por el impacto del IPC (el 1% hasta la fecha). Son 26,4 millones más de los que 13,4 se destinarán a pagar una cuarta parte de la paga extra que se eliminó en 2012. Harían falta 350 m. de € más, tan solo para que los presupuestos de 2015 alcanzaran el nivel de 2009. Y es que en este periodo el descenso del gasto ha sido continuo: 1 punto respecto al general y un 12% en el gasto por alumno-a.

Tomemos los parámetros que tomemos, la educación de nuevo va a perder peso:
-Sube menos que el presupuesto global (4,15%), incluso si descontamos el pago de la deuda. En
este caso el presupuesto global sube un 2,65%.
-Respecto al presupuesto general, el gasto en educación pasará de ser el 24,86% al 24,08%. Sin
contar la deuda: del 27,02% al 26,55%.
-En relación al PIB , se va a pasar del 4,01 al 3,97%, muy alejado del 6%.

Es difícil prestigiar la función docente (objetivo del Departamento) congelando por quinto año
consecutivo unos sueldos que fueron recortados en 2009. Acumulamos ya una pérdida de poder adquisitivo de mas de un 20%.

Es preocupante el aumento continuo del número de alumnos-as por aula: de 19,3 a 19,5 en Primaria, de 19,8 a 20,1 en secundaria, de 22,3 a 26,8 en bachiller. Además de empeorar la prestación de un servicio público, se pierden cientos de puestos de trabajo. Y si añadimos que se dan por buenos los recortes que se impusieron en 2013 a sustituciones, el panorama es desolador. Y en esta situación el Departamento intente vender como logro la gestión de una OPE de 275 plazas, campaña de imagen que va a salir cara a las arcas públicas: 3.135 € plaza con un total de 862.000 €.

Una de las novedades es una nueva partida de 240.000 € para impulsar el proyecto “Eskolan
Ekiten”. Este programa se encuentra actualmente paralizado por la denuncia de este sindicato y da un paso más en la privatización del sistema educativo: no se satisfacen las demandas reales de los centros con personal propio y se introduce en algunas aulas a educadores ajenos, dudosamente cualificados, contratados en condiciones precarias por una Fundación Privada de carácter conservador.

La subida en el capítulo de obras viene a remendar en parte recortes anteriores (de un 30% respecto a 2012). Pese a ello los presupuestos no garantizan la oferta pública porque el Plan de
infraestructuras que se presentó en abril para los próximos 4 años contempla un recorte de más de un 50% respecto a lo programado en el anterior.

Llama la atención el fuerte recorte (un 7,4%) que experimenta la aportación al Consorcio público Haurreskolak para financiar el ciclo 0-2. Pese a la petición del Parlamento, en los presupuestos no se implementan medidas ni para reducir ni para racionalizar unas cuotas que son inasumibles para muchas familias. Y como contrapunto, la enseñanza concertada, que pese a los recortes sufridos sigue manteniendo niveles de financiación muy superiores a los del resto del estado: destacan los 529 m. de € que se destinarán a los conciertos educativos (un 1,1% más)

Euskal Herria, 22 de noviembre de 2014

Nota de prensa: Presupuesto de Educación 2015 CAPV: Uriarte se resigna a gestionar recortes. PDF